«El mejor libro de Tondelli. El amor como tensión, peligro, descubrimiento, meditación sobre el mundo, revelación de futuro.»
Oreste del Buono, Panorama
«El libro, si acaso es posible, tiene un sonido especial, un color especial. Sonido y color de elegía, de melancolía corrosiva.»
Enzo Siciliano, Corriere della Sera
«Un extraordinario y feliz relato de amor y de muerte, de nostalgia y de madurez, de impotencia y de grandeza, donde se reconoce la crisis de nuestro tiempo y susmisteriosas razones.»
Cesare de Michelis, I Fiori di Carta
Dividida en tres «movimientos», entre viajes de ida y de vuelta y algunos flash back, Habitaciones separadas es la historia de un viaje intimista suspendido entre recuerdos y lugares del pasado. El protagonista, Leo (un escritor consagrado que creció en un pueblo del valle del Po), recuerda y recompone los retazos de su historia de amor con Thomas, un joven músico alemán, cuyo recuerdo le ha dejado una estela de sentimientos contradictorios y dolorosos.
Al recorrer hacia atrás las etapas de su pasado, se va hilvanando una larga y atormentada reflexión sobre la vida y la muerte, sobre el amor y la madurez. Se revelan los fragmentos de una historia de amor formada en habitaciones separadas, entre continuas separaciones y acercamientos, entre encuentros «casuales» en viajes por Europa, pero dejando siempre la puerta abierta a la posibilidad de volver a refugiarse en la soledad. Un amor que también pasa por el tormento de los celos cuando Thomas conoce a una chica y empieza con ella una relación «socialmente más llevadera» y menos compleja que la de los dos hombres. Es sobre todo la historia de un amor dramáticamente truncado por la enfermedad de Thomas y su prematura muerte, que Leo no puede dejar de revivir.
Habitaciones separadas es una novela melancólica, amarga y tierna, de atmósferas otoñales e introspectivas, entre visiones elípticas y fragmentarias de un pasado que se reconstruye a través lugares e itinerarios. Son páginas de delicada sensibilidad, como las que describen el viaje de Leo a su pueblo natal, donde el protagonista se busca a sí mismo e intenta reconstruir su historia.
Ya con su libro de exordio (Otros libertinos, 1980), Pier Vittorio Tondelli se sitúa en el centro del debate cultural italiano. El tímido muchacho de provincias irrumpe con un «escándalo» en el adormecido clima cultural italiano, es encausado por «obscenidad» y posteriormente absuelto de todos los cargos. Así empieza su andadura literaria, caracterizada por una búsqueda constante del lenguaje, la musicalidad y el ritmo de las palabras. Nos describe con delicadeza e ironía el mundo de la homosexualidad y la promiscuidad en escenarios de soledad, con la sola compañía de los mitos generacionales de su tiempo. Tondelli, sin pretenderlo, provocó grandes rechazos y grandes adhesiones y se impuso como escritor de culto de toda una generación. Melancólico, resignado, irónico y sensible, a veces crudo y desencantado, sigue apasionando sobre todo por su estilo y su empleo del lenguaje, una combinación de densidad y ligereza, urgencia, ritmo, frescura y mirada contemplativa. Un lenguaje que emplea su propio sonido, y que no puede prescindir de las referencias literarias y musicales de toda una generación formada con Kerouak y Cohen, impregnada de la melancolía de los Smith y de la rabiosa ironía de los italianos CCCP. En los años ochenta, Tondelli se empeña en proyectos culturales de largo alcance, como el de Under 25, que se propone dar a conocer la nueva generación de escritores italianos. También funda y dirige la revista cultural Panta. Muere de sida en 1991 con sólo treinta y seis años.