En 1938, en plena Gran Depresión, Francis Phelan, exjugador profesional de béisbol, sepulturero a tiempo parcial y vagabundo a dedicación completa vuelve a su ciudad natal, Albany, de la que se había marchado veintidós años antes tras un desgraciado accidente. Le acompaña Helen, una vagabunda alcohólica con la que comparte su vida desde hace años. A su regreso, los recuerdos y los fantasmas de un pasado violento lo asedian en cada esquina. ¿Será capaz de hacerles frente o terminará huyendo de nuevo?
El reencuentro con su familia, con los paisajes y personas que le vieron crecer, y el contraste de todo ello con sus veinte años de existencia marginal y atormentada, hará que Francis sienta por primera vez en su vida que la redención es posible.
Publicada en 1983 y ganadora del Premio Pulitzer de Ficción y del Premio del National Book Critics Circle, Tallo de hierro es una de las novelas más destacadas de William Kennedy, autor de un magistral ciclo novelístico ambientado en la ciudad de Albany.
«Narrativamente Kennedy es sinónimo de energía verbal y fabulación iridiscente. De hecho todas sus novelas se desenvuelven en un sitio con sabor a invención mítica, Albany. Kennedy nos ofrece su osadía psicológica para concebir sus protagonistas singularísimos, nacidos para consumirse en su propio fuego. [...] como ocurre con todos los novelistas de verdad, en torno a sus héroes pululan otros personajes que se van ganando, página a página, su lugar de honor en esta intensa representación de la entrega y la desilusión humanas.»J.Ernesto Ayala-Dip
«Se está ante un clásico vivo, que en solo veinte años y cinco novelas ha dado ya una obra clave para la comprensión de la vida, la historia y la literatura de los Estados Unidos.»Horacio Vázquez-Rial (8 de diciembre de 2011)
«Tallo de hierro salda las cuentas con un episodio de la historia norteamericana a través del personaje del hombre innecesario, anónimo, transformado por un momento en un auténtico chivo expiatorio. Un atisbo de grandeza y sentido entre la miseria y el desorden. Galardonada con el Pulitzer de Ficción y el premio del National Book Critics Circle, la novela de Kennedy supone quizá la cima de su autor en lo que se refiere al uso del lenguaje: unos diálogos cortantes, luminosos, en la tradición de Chandler y Hammett, y unas sorprendentes transiciones desde ese mundo tangible y doloroso a lo sobrenatural.»Gabriel Insausti (La Gaceta)