¿Puede un parque como el de Collserola, de 8.500 hectáreas, situado en plena área metropolitana y rodeado por una población de más de tres millones de habitantes, sobrevivir en pleno siglo XXI? La respuesta no es fácil. En los últimos veinte años la naturaleza se ha convertido en un producto de uso masivo, y su fragilidad y la mala utilización que le damos han acentuado en todo el mundo su progresivo deterioro.
A principios de los años ochenta, desde la Corporación Metropolitana ya se iniciaron acciones para la protección del parque; pero no es hasta el año 1987 cuando la Administración -a través del Patronato Metropolitano del Parque de Collserola, primero, y del Consorcio del Parque de Collserola, posteriormente- responde plenamente a este interrogante mediante un gran número de intervenciones, realizadas físicamente sobre el territorio, con una doble fi nalidad: por un lado, la de proteger, restaurar y, en defi nitiva, ayudar a que los sistemas
naturales del parque no sólo se conserven sino que se potencien y fortalezcan; y, por otro, la de posibilitar a la gran cantidad de personas que lo visitan un uso sensato y seguro, que no ponga en peligro los sistemas naturales que al mismo tiempo estamos protegiendo.
Este libro pretende cumplir varias funciones. Primeramente, ser un instrumento de información para todas las personas a las que -conozcan o no el parque de Collserola- les interese la naturaleza y les preocupe su protección. También quiere ser una herramienta metodológica, llena de ejemplos, para aquellos profesionales que trabajan en estos temas, desde multitud de escalas y vertientes. Y, por último, pero no por ello menos importante, es un documento
que muestra y justifica el trabajo multidisciplinario llevado a cabo por la administración local, de forma continuada e intensa, sobre una pieza de territorio de importancia capital para el buen funcionamiento de Barcelona y de su región metropolitana.